viernes, 7 de mayo de 2010

Para comenzar... Y para Terminar.




Para el inicio: 

Al olor del puerto que se cuela por Las Ramblas, a Canaletas que cumplió con su hechizo, al Gótico, a las glorietas donde los enamorados bailan rock and roll, a los tejados de Gracia, a la magia del parque Güell, y claro, a Joan, quien me acompañó en cada embeleso.







Y para el final:


Esta era la historia que me faltaba por contarte viejo Jacinto, ahora ya sabes por qué y de dónde llegué, si quisiera regresar, ya no sabría hacia dónde, pregunto al jardinero, y el jardinero no me responde. Hay gente que es de un lugar, no es mi caso, yo estoy aquí, de paso, nadie diferente a Drexler podría decirlo mejor. Ni siquiera yo. De nuevo estaré de paso viejo, no sé a dónde me lleve ahora mi Melancolía, dejaré tu cuerpo en el la playa que fue mi casa este tiempo. Tal vez no vaya muy lejos, tal vez estoy más cerca de casa de lo que siempre pensé; claro, si ésta es mi casa. Ahora quisiera sólo dejarme llevar, como la tarde de abril aquella en que el olor del puerto me hizo recordar el viejo sueño de encontrar una pequeña casa cerca al mar en la que pudiera habitar, cuando ya lo único que se quiere es dejar que la espuma llegue a los pies, mientras se recuerda y se construyen escaleras de palabras, mientras otros cuentan y cantan sus historias también.